17 de septiembre de 2009

En 200 años!

Que 200 años no es nada! Tantas victorias. Tantas derrotas! Algunas más evidentes que otras, las más se mantienen ocultas hasta nuestros días. Pienso en aquellos que dieron la vida por sus ideales, los mismos que ahora se discuten llevando un perfume caro, los que de vez en cuando nos hacen ver lo malo que son "los otros", los de "la otra lista" y lo bueno que somos nosotros. 200 años de luces y sombras, de triunfos como el derecho a voto de personas como usted o yo, que tan sólo necesitamos estar inscritos en el Registro Electoral para ejercer nuestro derecho, sin distinción alguna. Viva Chile! Viva el Bicentenario!

2 de mayo de 2009

Verano de 1993

Verano de 1993. Un día antes de tu cumpleaños. Pensar que han pasado 16 años de nuestras vidas, con largas historias, con grandes alegrías, pero también esas pequeñas espinas que nos han hecho sufrir. Aquí estamos, con nuestras vidas de adultos, con aquellas historias que nos han hecho reír de buena gana: historias de niños. ¿Qué contar que no sepas? Es una vida y quisiera decir eso de "vida, nada me debes, estamos en paz".

27 de abril de 2009

Gracias a la vida...

A veces pasamos por la vida como por un tubo; todo nos parece ajeno. Muy pocas cosas nos mueven y tantas otras nos son indiferentes y lo peor de todo es que las personas nos son indiferentes. Algunas veces he discutido arduamente sobre el sistema que económico que impera y si ponemos atención, nos daremos cuenta que es nefasto: lo importante es producir y poseer, en este esquema no hay lugar para grandes ideales, grandes batallas, sólo interesa el saldo en la cuenta corriente (y hablo desde mi realidad) y esas pequeñas satisfacciones burguesas que nos recuerdan que estamos vivos. Creo que hemos perdido la capacidad de escandalizarnos y poco importa que las cosas no marchen o si fulanito ya no existe, todo eso sin contar el egoísmo enfermizo de algunos en perseverar en que a los otros no les vaya bien, es decir, son como el perro del hortelano, no come ni deja comer. Entonces, ¿qué hay que hacer? Creo que hay que empezar por escandalizarnos, no conformemos con esa máxima lapidaria: "así es la vida, que se le va hacer". Claro, por hoy sólo hay que escandalizarse.

4 de noviembre de 2008

Tras unos ojos

Después de esas palabras dichas en silencio y una sonrisa que no terminaba de dibujarse, se veía tu pena, fue una lástima pero tuve que seguir sonriendo pues más de algún invitado requería mi atención y hoy tras cerrar los ojos y repasar aquellas imágenes volví a descubrirte triste y quise entender los motivos. La falta de práctica me impide ver más allá de las imágenes y escuchar tras los silencios. Hace un tiempo que estamos lejos, con una cercanía que pone barreras y a veces, tras un momento de cordura vuelvo a recuperarte, quizás deba decir de locura, pues toda mi vida ha sido una locura. Vuelvo sobre tus ojos tristes, sobre aquellas palabras apenas musitabas, dichas en cierto modo para ser olvidas y sin embargo tras la luz fugaz que se cuela por mi ventana, vuelven una y otra vez, quizás no pronunciaste el suave conjuro del olvido o dijiste las palabras equivocadas o una mezcla de ambas. No quiero indagar en las razones que tengo para retener tus ojos tristes, no intento traducir los silencios, sólo quiero ver que tus ojos brillen de nuevo. Te repito que he perdido casi todos mis poderes y no estoy para traductor de ojos tristes ni para escuchar en cada silencio. Perdóname hoy.

22 de agosto de 2008

pense en ti

Ayer pensé en ti y sentí nostalgia. Una sonrisa iluminó mi rostro y recordé momentos hermosos. La vida quizá es eso: un continuo recordar, vivir para volver a estar en esos momentos sin poder editarlos. A veces pienso que deberíamos poder editar todos los hechos de la vida, pero nuestro poder no alcanza para cambian un ápice lo que hemos hecho. Creo que es una injusticia: estamos condenados a revivir sin alterar, no se nos permite, pero puedo volver a ver tus ojos, tu mirada y sentir que me quieres como ayer, que no sólo ocupo un espacio en tu memoria, que no sólo estoy en un periodo de tu vida. Te abrazo con mis recuerdos. Pensé en esos paseos por esas calles; las calles de las miradas, en que con toda seguridad te sentías una reina y tu cara irradiaba luz y que provocaba envidias, esas calles que eran escenarios con miles de extras libres y a la vez presos de nuestra presencia bajo un director que dirige tras bambalinas y que jamás sale a escena y que sin embargo exige en cada escena y no permite que se cambien nuestras líneas. Así quedaran por siempre.

Perdóname

Lleva sentada más de dos horas! Esperando una cita que nunca se ha de concretar porque no tiene las agallas para mirarte de frente y decir que no hay nada que conversar. Pienso en todo y quisiera no estar en su lugar: horas perdidas. Quizá, unos niños cansados llegan de la escuela y ella piensa una y otra vez en ellos. Con su pensamiento recorre sus manos, se detiene en sus ojos, en su sonrisa, en la vida misma. Vuelvo y veo sus ojos y siento vergüenza ¿Cómo le cuento que la cita no se concretará hoy y quizá nunca? ¿Quien soy para juzgarte? No puedo mirar tu cara sin pedir perdón por ti, aunque ahora te sientas poderoso, bien sabes de las vueltas de la vida...

8 de agosto de 2008

del facebook

Son millones las personas que están fascinadas con el facebook y no faltan quienes lo consideran lo máximo y viven pendiente de una cacería de amigos como si el asunto se trata de una competencia de quien tiene más y otros tantos piden que les "sugieran" amigos. Yo que siempre he desconfiado de estas cosas me tomo el asunto con calma y desde luego que si me piden que me una a un grupo, lo hago con una sonrisa previa, total, con un pequeño clic podemos hacer feliz a alguien. Pero mas allá de las luchas y del pavoneo de algunos, el facebook no es mas que un simple resumen de las personas que uno conoce o se relaciona, es decir, su utilidad radica en que puedes ver reflejado en pantalla tus relaciones sociales, pero en ningún caso las cambia o la altera, pues uno se sigue relacionando del mismo modo con las personas que aparecen etiquetadas como "amigos". Es una mera lista indicativa que se compone de amigos, conocidos de diversas clases y desconocidos que se agregan por extrañas razones, todos ellos componen ese universo virtual que nos conduce en nuestra existencia.

25 de abril de 2008

Suerte

"Tienes que darte con una piedra en el pecho" me dice frecuentemente, en tono de broma, un amigo, creo que no deja de tener razón, pues tengo la suerte de vivir en un país que es "el niño rico del curso" o mejor dicho el "niño bien" en medio de un "barrio callampa". Varios indicadores nos sitúan por sobre nuestros vecinos y somos todo lo que ellos quieren: una economía floreciente, orden fiscal, inversión, libertad de inversión, libertad para arreglines "legales" (en medio de tanta maravilla no se nota si uso un auto fiscal para transportar mis frangüesas), un gobierno estable, presidente mujer, aunque eso ya no es una exclusividad, dinero para regalar en la proximidad de las elecciones, bonos para esto y para lo otro, representantes "propios" en cada institución para que defiendan nuestros intereses, obras públicas por montón, sean estas verdaderas o un montaje, a veces no se sabe si realmente existe o no, pero eso es un mero detalle y un descalabro de precios que no se nota, pues los que deciden tienen de sobra como para no sentir la angustia del sobre endeudamiento o de la falta de recursos o cuando no hay mas opción que una taza de té y del peor. Tengo la suerte de vivir en un país donde nos damos gustos de ricos, nos ocupamos de "grandes problemas", "grandes opciones", de esas que nos hacen salir a la calle para protestar por un fallo que no nos gusta e intentamos que se haga nuestra voluntad a como dé lugar, para eso somos solidarios, progresistas y todo lo que se lleva y es políticamente correcto, los verdaderos problemas quedan para "después". Tengo la suerte de vivir en un país donde la suerte cambia a cada rato pues hoy se me respetan mis derechos fundamentales, quizá porque tengo esta suerte, pero si fuera "chino" no la tendría, me encandilo con los millones y dejo de ser el icono de los derechos humanos por unas tres chauchas. Esa es mi suerte.